La posibilidad de entrar en contacto con el cuerpo
A menudo escuchamos por primera vez la recomendación de “entrar en contacto con el cuerpo” en una clase de teatro, y nos parece sorprendente.¿Cómo?¿Hay que entrar en contacto con el cuerpo?¿Por qué?¿Acaso no estamos siempre en contacto con el cuerpo?La respuesta es, efectivamente, NO.La pregunta tiene carga poética, supone una paradoja. La respuesta aclara la pregunta. Sí, hay que ponerse en contacto con el cuerpo porque tendemos a estar secuestrados por nuestros propios pensamientos, por un quehacer diario acelerado, estresante, dominado por la prisa, la ansiedad y el mandato constante de los “debería” y los “no debería” [+]Leer más